Los 10 coches más feos de la historia

Desde cubos de aluminio con tres ruedas hasta el coche más famoso de la televisión por salir en Breaking Bad: repasamos los 10 coches más feos de la historia de la automoción.

Los 10 coches más feos de la historia
Muchos de los coches que a día de hoy son considerados feos en realidad son objetos súper deseados por coleccionistas y fanáticos del mundo del motor
Publicado en Motor

Muchos son los coches que recordamos como icónicos; ya sea por su belleza o por el gran recuerdo que nos dejaron cuando aparecieron en series o películas que se han mantenido vigentes de generación en generación: el Pontiac Firebird (KITT en 'El Coche Fantástico'), el DeLorean DMC-12 (de 'Regreso al futuro'), el Ferrari Testarossa (de 'Miami Vice'), el Ferrari Mondial Cabriolet (de 'Esencia de mujer') o el Aston Martin DB5 (de 'James Bond').

Pero como la belleza es subjetiva y como toda moneda tiene dos caras... en contraposición también hay un ranking de los coches más feos de la historia. Es por ello que en este artículo vamos a repasar los diez coches más desagradables para la vista que se han visto en las calles y a los cuales “incluso los perros ladrarían” tal y como dijo un Premio Pulitzer: Dan Neil.

Fiat Multipla

Los 10 coches más feos de la historia

En Italia tuvo una gran acogida debido a su bajo consumo y su espacioso maletero

Era prácticamente imposible no empezar esta lista con, posiblemente, uno de los coches más feos -sino el que más- para la gran mayoría de personas. Y es que este modelo de la marca italiana (producido entre 1998 y 2004) fue catalogado por el reputado programa inglés Top Gear como el más feo del año 1999.

Este monovolumen con capacidad para seis personas en dos filas de tres y con interior amplísimo se ganó todas las críticas negativas habidas y por haber por parte de los expertos debido a su extraño y peculiar capó con las luces a dos niveles, su extraña calandra y su luna revestida por el chasis.

Eso sí, a pesar de no gozar con una gran popularidad en ventar a nivel global, en Italia sí que triunfó debido a su bajo consumo y su espacioso maletero de 430 litros de capacidad.

Y es que su fama por 'feo' fue tal que llegó incluso a estar expuesto en el Museo de Arte Moderno de Nueva York, siendo este uno de los mayores logros de la industria del automóvil. Y es que buena o mala, la fama sigue siendo fama, y este coche dejó una huella imborrable en el sector.

BMW Isetta

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Steve Urkel, protagonista de Cosas de Casa, con su BMW Isetta

El claro ejemplo de que hasta las grandes marcas son capaces de lo mejor y de lo peor... y en este caso, fueron capaces de hacer uno de los coches más feos de la historia. Se trata del que fuera bautizado como el 'huevo con ruedas', el 'coche pompa' o 'la pelota de fútbol', y es que su diseño redondo con dos ruedas delanteras y una trasera no dejaba indiferente a nadie.

Pareciendo incluso un coche de juguete, este vehículo considerado 'microcoche' y que a día de hoy es toda una reliquia para los coleccionistas fue fabricado entre los años 1953 y 1962 por una sencilla razón: en ese momento, la situación entre la sociedad alemana demandaba un coche compacto y económico para desplazarse, por lo que a la marca germana se le ocurrió este icónico modelo.

Como curiosidad, este BMW Isetta aparece en una de las grandes series de los 90: Cosas de Casa. Y es que en esta serie, el famoso Steve Urkel poseía este modelo de coche, un coche del que se mofaba reiteradamente su vecino Carl Winslow.

Reliant Robin

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Uno de los coches más bizarros y extraños que han existido: con dos ruedas traseras y una delantera

La joya británica de tres ruedas; osease, uno de los tres coches más feos de toda la historia por méritos propios. Este coche nacido en Reino Unido con dos ruedas traseras y sólo una delantera nació como la versión opuesta al Isetta y gozó de una grandísima popularidad entre los ciudadanos ingleses.

Tal fue su fama que es un vehículo feo a la par que longevo, y es que desde su nacimiento en 1973 gozó de tres generaciones distintas, finalizando su producción en el año 1981.

Considerado como motocicleta debido a sus tres ruedas, las tasas a pagar eran mucho menores que las del resto de vehículos, por lo que era una de las opciones deseadas por la población inglesa.

Eso sí; debido a su altísimo consumo (a pesar de su compacto tamaño) y su horrible reparto de pesos pusieron fin a su producción ocho años después de su aparición. Aunque no sin menos importancia, esta se retomaría en el año 1989... abandonándose de nuevo, pero esta vez para siempre, en el año 2002.

Como curiosidad, un modelo parecido al Reliant Robin era el Reliant Regal Supervan III, una camioneta similar a la que acabamos que ver que se hizo enormemente popular debido a sus numerosas apariciones en Mr. Bean. Y es que cada vez que el actor Rowan Atkinson se cruzaba con dicho vehículo, sucedía algún tipo de conflicto en la carretera, dando lugar a situaciones cómicas.

Nissan Cube

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Un coche feo, peculiar... pero que tuvo su nicho de compradores y causó sensación en Japón

Con su aspecto cuadrado en forma de contenedor este modelo japonés de la marca Nissan causó un gran rechazo en el mercado europeo. Y es que aunque su cometido lo cumplía: entrar en el segmento de los mini volúmenes con un espacioso interior, el mercado internacional fue despiadado y no tuvo ningún reparo en criticar dura y amargamente al Cube, que a posteriori se convertiría en uno de los coches más feos de la historia.

A pesar de ello, este modelo de primera generación producido entre 1998 y 2002 (posteriormente existirían una segunda y una tercera generación, estando esta última en producción actualmente desde el año 2008) consiguió captar a una serie de fieles nipones los cuales sí se compraron este coche.

Tal fue su 'repercusión positiva' en el mercado japonés que Daihatsu con el modelo Materia y Kia con el modelo Soul copiaron su aspecto y estilo.

Toyota WiLL

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Acabó por convertirse en uno de los 'Key Car' más reseñables de la historia de Japón

Otro fracaso estrepitoso de los nipones que no causó sensación... ni en el propio país del 'Sol Naciente'. Este modelo que vio la luz en 1999 y que 'murió' en el año 2001 nació como reclamo de la entrada del Siglo XXI con la finalidad de atraer al público más joven.

Su diseño compacto en forma de utilitario con voladizo trasero y un pilar en 'C' invertido fue presentado en el Tokyo Motor Show y Toyota lo denominó como una "cápsula de cuatro puertas", lo que a la postre le acabó convirtiendo en uno de los 'Key Car' más icónicos a la par que feos de Japón.

Eso sí: era un adelantado a su tiempo. Y es que su producción estaba realizada en gran medida con materiales reciclables y, por si fuera poco, emitía unas cantidades de CO2 un 25% inferiores respecto de la normativa medioambiental nipona del momento.

Sebring - Vanguard CitiCar

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El 'coche ovni', también conocido como el 'coche eléctrico preferido por los estadounidenses en la década de los 70'

Tenemos ante nosotros a uno de los coches más feos de la historia, con aspecto de ovni (uno de los temas que tanto cautiva a los estadounidenses) debido a sus líneas rectas y su extraño y reducido habitáculo interior y que, a su vez, fue el vehículo eléctrico más producido y más vendido en los Estados Unidos entre 1974 y 1977.

Y es que sí, fue un pionero y un adelantado a su tiempo: nacido como alternativa al combustible, este vehículo eléctrico fue increíblemente popular entre los ciudadanos norteamericanos, sobre todo entre los urbanitas, que pronto coparon las calles del CitiCar.

Con 2,4 metros de longitud, tres puertas, espacio para dos ocupantes, un motor eléctrico de 3,5 CV, componentes mecánicos procedentes de carritos de golf, suspensiones sin amortiguadores y realizado casi en su totalidad en plástico o aluminio, este coche alcanzaba los 40 kilómetros por hora vendió más de 2.300 unidades en tres años, generando todo un 'boom' tras la famosa Crisis del Petróleo que azotó durante los años 70 la economía yankee.

Citröen Ami 6 Berlina

Los 10 coches más feos de la historia

Un coche elegante con una estética muy peculiar pero con una grandísima acogida en Francia, España y Argentina

Este Citröen nacido en el año 1961 sorprendió a propios y extraños por sus 'líneas imposibles' que aunaban todas las capacidades y requerimientos de una berlina en un coche ágil, versátil y amplio en su interior.

Lo más extraño de este vehículo son sus afiladas formas en la parte trasera del mismo, con una caída pronunciada que da lugar a un maletero muy recto, un morro curvado en forma de 'U' y la altura del chasis en la parte trasera, más alta que en la delantera.

Este vehículo, a pesar de ser considerado uno de los más feos de la historia, fue enormemente popular entre los años 60 y 70, y es que la marca francesa llegó a comercializar más de un millón de unidades en todo el mundo, siendo Francia, España y Argentina los países en los que más se vendió gracias a su fabricación en las fábricas de Rennes, Vigo y Buenos Aires respectivamente.

Tata Nano

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No llegó a Europa y se retiró del mercado por ser uno de los coches más inseguros de toda la historia: no llegaba ni a los mínimos establecidos por la ONU

Sin duda uno de los más feos y, a su vez, uno de los más baratos que se podía encontrar en el mercado. Nacido en el año 2008, salió a la venta como el coche más barato del mundo, y es que podíamos hacernos con él por unos 3.000€.

Fue creado por el gigante indio Tata Motors con la finalidad de que la población india más pobre pudiese comprarse un coche adaptado a sus necesidades. Este coche resultó ser: compacto, con cinco puertas, muy barato... pero peligroso.

Con más de medio millón de unidades vendidas, este coche finalizó su producción en el año 2018 debido a los bajísimos resultados obtenidos en los test de seguridad: la principal razón por la que se puso fin a su producción.

Este motivo también fue el causante de que el Tata Nano no llegase a Europa, y es que, además de su tendencia a incendiarse con facilidad, no superaba ni tan siquiera los requisitos mínimos estipulados por la ONU en materia de seguridad.

En el 'crash test' recibió una puntuación de cero estrellas (Tata Motors aseguraba estar convencida de poder llegar a las cuatro), lo que se traducía en que un humano no sobreviviría a un accidente en este coche. Además, recibió una calificación de 0 en materia de protección infantil, ya que resultaba imposible instalar asientos adaptados a niños en el automóvil.

Pontiac Aztek

Los 10 coches más feos de la historia

"El coche al que ladrarían los perros por feo y aterrador" se ha convertido en todo un mito para los fans del universo creado por Vince Gilligan

Feo, muy feo, pero icónico, muy icónico. Esta maravilla de General Motors ha resultado ser casi tan desagradable para la vista como maravilloso para todos aquellos fans incondicionales de Breaking Bad; y es que hablamos nada más y nada menos del coche de Walter White; Heisenberg para los amigos.

Presentado en el año 2001 como el "coche más versátil del planeta", tuvo el desagradable privilegio de ser considerado el mayor fracaso de la historia moderna de la marca estadounidense.

Este monovolumen con aspecto extravagante, con unos guardabarros cuadrados y con un uso excesivo de plástico, fue catalogado por la revista Time como uno de los 50 coches más feos de toda la historia pero, sin duda, que con el paso del tiempo ha ido escalando puestos, impulsado también por el contexto que le rodea.

Enormemente codiciado por los coleccionistas y fans empedernidos del universo Breaking Bad fue incluso motivo de burla por parte del periodista y premio Pulitzer, Dan Neil, quien llegó a asegurar que era uno de los peores coches de la historia porque era “un coche al que los perros ladrarían por ser feo y aterrador”.

General Motors finalizó su producción en el año 2005 consiguiendo llegar a la cifra de 120.000 unidades vendidas en total.

SsangYong Rodius

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Inspirado en los yates de lujo... que resultó ser un mastodonte en la carretera en forma de ballena

Seamos sinceros: su cometido lo cumplía, pero eso no quita que este coche de la marca surcoreana haya pasado a la historia como uno de los más feos por motivos más que evidentes. En el año 2005 salió a la venta este monovolumen familiar cuya misión era albergar la mayor cantidad de personas posibles en su interior, algo que consiguieron... a costa de 'abandonar' su imagen exterior.

Bajo la premisa de estar "inspirado en los yates de lujo" el traslado de líneas del papel a la realidad dejó bastante que desear, aunque eso no les impidió crearse un público propio. A pesar de su robusta y poco esbelta imagen exterior, era una de las mejores opciones para aquellos que dejaban a un lado lo superficial de la belleza de un vehículo y daban prioridad al confort y las prestaciones del mismo.

Tal fue su acogida que en el año 2008 salió a la venta una segunda generación del Rodius con unas líneas un poco más suavizadas, aunque esto no repercutió en un incremento de las ventas. Incluso, a día de hoy, podemos seguir haciéndonos con los servicios de un Rodius, y es que la última generación de este famoso modelo de la 'Doble S' surcoreana salió a la venta en 2018, hace tan solo cinco años.

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