Las ventas de gasolina ya superan las diésel en Europa, ¿futuro eléctrico a la vista?
Las motorizaciones diésel están viviendo, al parecer, su ocaso en el mercado. La gasolina, algo menos contaminante, está ganando adeptos, pero esto solamente tiene un camino, la hibridación y el coche eléctrico.

Hasta hace un año, el diésel era la opción preferida en Europa. Esta curiosa tendencia solamente tenía apoyo en el Viejo Continente, debido principalmente a un alto precio del carburante. Sí, pese a que son más caros de mantener, la gente solamente se ha fijado estos años en la diferencia de unos céntimos el litro.
Sin embargo, tras el estallido del escándalo de las emisiones conocido popularmente como Dieselgate, sumado a la mala imagen contaminadora de la tecnología y su mayor coste de mantenimiento, parece ser que el diésel tiene los días contados en el mercado.
El diésel está experimentando una fuerte caída de ventas
Es pronto aún para asegurar tal afirmación cuando en Europa, desde 2009, se han vendido más coches diésel que gasolina, pero todo hace pensar que seguirá esta tónica los próximos años.
Ahora, con los datos actualizados en el mes de septiembre, se puede afirmar que todo ha dado un vuelco en cuestión de meses. La gasolina, pese a ser un combustible más caro, requiere un mantenimiento menos costoso, lo cual puede reducir el sobrecoste anterior.
¿Qué datos podemos destacar del cambio de tendencia producido en la industria del automóvil? Es importante tener siempre en cuenta qué posibles efectos pueden derivarse hacia el mercado paralelo del futuro, el del coche híbrido y eléctrico.
¿Mayor concienciación o rechazo al coche eléctrico?
En primer lugar, es importante destacar qué ha ocurrido para poder ver cuáles han podido ser las causas del cambio de tendencia. La European Automobile Manufacturers Association (ACEA) ha publicado un informe en el que se muestra la evolución de las diferentes tecnologías de la movilidad.

El diésel ha experimentado una fuerte caída en un año. ACEA
La tabla anterior muestra el nivel de matriculaciones producidas en el primer semestre de este año y el pasado. Los datos recopilados corresponden a la Europa de los 15.
Según se puede observar, la tecnología diésel ha visto como el número de matriculaciones ha descendido un total de 154.323 vehículos, es decir, un 4,3% menos de las que se produjeron durante el mismo periodo del año 2016.
La confianza en la gasolina gana peso de nuevo en el mercado
En cambio, las matriculaciones que contaban con motorizaciones gasolina experimentaron un incremento del 10%, convirtiéndose así, en el principal beneficiado del movimiento de filas.
Del mismo modo, podría decirse que la formación de híbridos, enchufables, eléctricos, GLP, etc. (denominación como vehículos alternativos) ha ganado peso por valor del 35%, siendo aún muy reducido su peso en el mercado.
Así pues, tras analizar los datos ofrecidos por la entidad europea, tan solo podemos llegar a la conclusión de que los vehículos diésel son los primeros que abandonarán el mercado. No se sabe la fecha exacta, por supuesto, pero sus cualidades se han ganado esta invitación de salida.
Demasiados palos ha recibido el diésel en las últimas fechas
Del mismo modo que hemos comentado unas líneas más arriba, podría decirse que al diésel se le está volviendo todo en contra. Una mayor preocupación medioambiental por parte de los consumidores y unas ya no tan claras ventajas ha provocado volver, de nuevo, al combustible más primitivo de la movilidad por carretera.
Así es, la gasolina seguirá siendo el referente los próximos años. Ahora bien, ¿qué ocurrirá después? Quizás estamos viendo la tendencia lógica del mercado. Diésel como principal apestado, refugio en una un tanto menos contaminante para pasar a la hibridación como próxima revolución.
Y sí, finalmente, la llegada en masa del coche eléctrico. Ahora bien, noticias como la de BYD y su coche eléctrico generalista podrían propiciar un adelanto de los acontecimientos. ¿Estamos preparados para la llegada masiva de la conducción limpia?
Quizás esta sea la raíz del problema. La infraestructura no podría acoger un parque automovilístico alternativo en el plazo de unos pocos meses. ¿Qué horizonte temporal, por tanto, podría establecerse? ¿2 años? ¿Un lustro? Es difícil de determinar.
Las cosas de palacio van despacio
El coche eléctrico está mejorando sus posiciones en el mercado, pero es pronto aún para entenderlo como una solución que ya está dando sus frutos. Es obvio que países como Noruega estén dando pasos de gigante, pero no es la tónica general.
Esto es un primer paso obligatorio para que prospere lo alternativo
Debe realizarse un esfuerzo mayor para que el coche eléctrico despegue de una vez. Mientras tanto, parece ser que la solución pasa inequívocamente por una estancia previa en el mercado de las motorizaciones de gasolina. Al fin y al cabo, al menos, son menos contaminantes que las diésel.
Como ya hemos dicho, no se sabe muy bien cuándo será la fecha en la que el mercado muestre su cambio de tendencia absoluto. Al menos, de momento, el principal problema (el liderazgo del diésel) ya ha caído. ¿Cuál será el próximo muro a derribar? Lo veremos muy pronto.