Este biorobot es capaz de mover tejido muscular en tiempo real

La robótica ha crecido de forma exponencial a lo largo de los últimos años. Se han producido importantes avances que tienen como objetivo buscar funciones específicas que puedan desarrollar. Nos encontramos, sin duda alguna, ante un momento clave en el desarrollo de esta nueva era de la tecnología. En este sentido, la incorporación de soluciones como el tejido muscular puede ser un factor que pueda llevar la investigación en esta materia a un nuevo nivel. Se trata de un trabajo especialmente importante por todo lo que lleva consigo detrás.

Mucho se ha hablado sobre la posibilidad de agregar piel sintética en las futuras unidades robóticas, pero lo cierto es que ya hay proyectos que están comenzando a mostrar el uso de piel de animales como una potencial solución factible. El mejor ejemplo de ello nos lo muestra un nuevo robot, al cual se le ha adherido piel de un ratón. Pese a que parezca mentira, consigue finalizar los movimientos para los que ha sido programado, algo especialmente importante para el trabajo que está realizándose.

Veamos, por tanto, cuáles son las características más interesantes que nos ofrece esta tecnología, por qué se trata de una propuesta muy interesante en términos de línea de investigación y, por supuesto, hasta qué punto nos encontramos ante un biorobot que puede ser el principio de futuros proyectos relacionados la creación de humanoides y otra serie de tecnologías futuristas. He aquí las claves que permiten entender estas pruebas como un elemento clave en el sector.

Un biorobot que puede desplazarse con piel de ratón adherida

Lo primero que cabe mencionar es que no se trata de la incorporación de tiras de piel de un ratón. En su defecto, estamos hablando de tejidos de animales sobre los cuales se han extraído muestras. Estos restos han sido incorporadas en un hidrogel para su utilización en el robot. Las células musculares de los ratones han conseguido reaccionar a la luz proporcionada por LED, pudiendo realizar el esfuerzo necesario para desplazarse. Se trata de un importante avance que puede dar una mayor autonomía a esta tecnología.

En el proceso de investigación, la tecnología de impresión 3D también ha tenido un especial protagonismo, ya que ha servido para crear el área en el que se encuentran todos los elementos clave del nuevo tejido artificial a base de células de un ratón de laboratorio. Este resultado puede ser la semilla para la creación de compuestos muy interesantes que podrían ser objeto de estudio en el medio y largo plazo. Al fin y al cabo, este tipo de tecnología puede incrementar las posibilidades de movimiento de propuestas como Spot, de Boston Dynamics.

Por el momento, de acuerdo con la información de TechEblog, se ha podido lograr, por el momento, desplazamientos de hasta 0,83 milímetros por segundo. Es importante tener en cuenta que son avances con un gran potencial de mejora para los próximos años, por lo que habrá que esperar un tiempo para ver cuáles son las verdaderas cualidades que puede tener esta tecnología en el seno de la robótica. Mientras tanto, seguirán probándose todo tipo de soluciones basadas en pieles sintéticas o híbridas con compuestos de seres vivos.

¿Llegará el momento en el que ya no haya diferencias entre un potencial robot humanoide y una persona de carne y hueso? Sophie, pese a contar con su propia identificación personal, no es suficiente para engañar a cualquier otro ser humano. Aun así, hay diversos programas que sí podrían estar cerca de copiar reacciones instintivas que hacemos ante determinadas situaciones.