Donald Trump se queda sin apoyos en su nuevo y loco plan: quiere controlar el tráfico espacial
La Oficina de Comercio Espacial existe desde la década de los 80 para otorgar licencias de satélites de teledetección

Aunque Donald Trump quiere hacer que "América vuelva a ser grande", sus acciones dicen todo lo contrario. En los cerca de seis meses que lleva siendo presidente de los Estados Unidos de América, ha puesto en riesgo varias agencias y entidades federales con la «excusa» de ahorrar costes: desde deteriorar la USAID (Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional) y CFPB (Oficina para la Protección Financiera del Consumidor) hasta el intento de cierre del Departamento de Educación, pasando por recortes masivos en múltiples agencias con más de 200 mil despidos.
Además, quiere eliminar los incentivos para comprar vehículos eléctricos nuevos. Los estadounidenses, hasta ahora, pueden acceder a un descuento de 7.500 dólares para comprar un coche de batería nuevo si cumplen una serie de requisitos. Muchos de ellos aprovechan la ayuda para adquirir un Tesla, por lo que la medida ha sido duramente criticada por Elon Musk (justo ahora que iba a incorporar la IA de Grok a sus automóviles, a pesar de haber sido bloqueada en Turquía por sus controvertidos comentarios).
Por si fuera poco, la administración Trump también planea desmantelar la Oficina de Comercio Espacial y cancelar el primer programa de control de tráfico espacial dirigido por civiles, una decisión con cada vez más detractores.
De 65 millones de dólares de presupuesto a tan solo 10 millones de dólares
Hace unos días, siete grupos comerciales de la industria espacial, que en total representan a más de 450 empresas, enviaron cartas a los líderes de la Cámara de Representantes y el Senado instándolos a oponerse a la propuesta de la Casa Blanca. Un portavoz del Comando de Operaciones Espaciales de las Fuerzas Armadas, que actualmente tiene la responsabilidad general de la gestión del tráfico espacial, afirmó que "seguirá abogando" para que una organización civil asuma la función de la Fuerza Espacial como agente de control del tráfico orbital.
La solicitud de presupuesto de la Casa Blanca (para el año fiscal 2026) recortaría drásticamente el presupuesto de la Oficina de Comercio Espacial de 65 millones de dólares a solamente 10 millones de dólares, y también eliminaría la financiación del Sistema de Coordinación de Tráfico Espacial (TraCSS). Este programa se estableció en el Departamento de Comercio después de que Trump firmara una directiva política durante su primer mandato presidencial para reformar la supervisión gubernamental de los movimientos de satélites y desechos espaciales en órbita.
La Oficina de Comercio Espacial existe desde los años 80 como agencia otorgante de licencias para satélites de teledetección y observación de la Tierra. TraCSS está diseñado como un sistema basado en la nube que sirve como centro neurálgico para la recopilación de datos de seguimiento satelital de los propietarios de naves especiales y de una red de telescopios y radares gubernamentales y comerciales.
Los grupos comerciales de la industria están presionando al Congreso para revertir la propuesta de la administración Trump y restaurar el presupuesto de la Oficina de Comercio Espacial al nivel de este año de 65 millones de dólares. "Una de las funciones más importantes de la OSC es brindar apoyo en la coordinación del tráfico espacial a los operadores de satélites estadounidenses, similar al papel de la Administración Federal de Aviación en el control del tráfico aéreo para la industria aérea estadounidense", escribieron los grupos comerciales en las cartas dirigidas al Congreso.