Qué pasa si las luces del coche se quedan encendidas
Dejarse las luces del coche encendidas es un descuido que puede tener cualquiera, pese al sistema de aviso que suelen tener los coches para intentar evitar este olvido

El ejercicio de conducir está lleno de acciones más o menos mecánicas que muchas veces se llevan a cabo casi de manera inconsciente por pura costumbre. Encender las luces cuando la visibilidad es reducida o directamente es de noche es quizá uno de esos movimientos. Tanto es así que, en ocasiones al bajarnos del coche, ya sea por un despiste, descuido o por las prisas, nos podemos dejar las luces del vehículo encendidas. Ni siquiera la alarma sonora y/o visual que suelen tener los coches para recordarnos que las luces están encendidas a veces sirve.
Dejarse las luces encendidas del coche es algo que le pueda pasar a cualquiera. Un error que se puede tildar de habitual, pero que tiene consecuencias para el vehículo. Lo más normal es que si te dejas las luces encendidas por un espacio de tiempo corto no pase nada, pero que si el olvido se prolonga durante horas y las luces del coche se mantienen encendidas durante un periodo de tiempo más amplio al final lo que va a suceder es que la energía de la batería se va a agotar, con todo lo que ello implica.
- Cómo funciona la batería de un coche
- Sistemas de iluminación del vehículo
- Qué ocurre si me dejo las luces encendidas
- Cómo comprobar si la batería del coche tiene energía
- Batería del coche descargada: ¿Cómo lo arranco?
- Sustitución de una batería descargada
Cómo funciona la batería de un coche
A modo de resumen, la batería es un elemento que normalmente está en el bloque motor del vehículo y que tiene por objetivo almacenar energía eléctrica por medio de un proceso químico con la luego alimentar ciertos sistemas del vehículo, como el motor de arranque o algunos de los sistemas eléctricos del mismo. La batería está constituida por un acumulador con placas negativas y positivas con una solución electrolítica que permite una reacción química que genera corriente eléctrica. Al suministrar electricidad a la batería, el proceso se invierte.
La labor principal de la batería como hemos dicho es aportar la energía necesaria para alimentar la puesta en marcha del motor de arranque del vehículo. Además, también sirve de apoyo al alternador cuando este no puede alimentar a todos los consumidores eléctricos del coche como pueden ser por ejemplo las luces del habitáculo o distintos accesorios de confort y seguridad. Por ende, la batería también se encarga de alimentar sistemas como el cierre centralizado, la radio, los limpiaparabrisas, el sistema de iluminación o el GPS.

La iluminación de un vehículo es un elemento fundamental, pero también nos puede jugar alguna mala pasada
Sistemas de iluminación del vehículo
Dentro de los sistemas eléctricos que son alimentados por la batería, uno de los que tiene un mayor consumo es la iluminación del vehículo. No es tanto así en lo referente a la iluminación del habitáculo como sí en la iluminación exterior del coche, sobre todo si los faros delanteros son halógenos, con un consumo mucho más elevado que por ejemplo la iluminación LED. De hecho, se estima que el conjunto de luces halógenas de un vehículo tiene un consumo de unos 135 vatios, mientras que los faros LED acreditan un consumo en torno a los 80 vatios.
En cualquier caso, está claro que el consumo de los faros del coche es uno de los más altos a los que se tiene que enfrentar una batería, por lo que si por un descuido o por un fallo del sistema los faros del vehículo se quedan encendidos cuando abandonamos el coche lo más normal es que la batería no pueda asumir este consumo durante un periodo prolongado de tiempo, entre otras cosas porque este sistema cuando el coche está en marcha se alimenta de otra forma.

Dejarse las luces del coche encendidas es un olvido muy frecuente entre los conductores
Qué ocurre si me dejo las luces encendidas
De todo lo dicho se deduce que el principal problema de dejarse encendidas las luces del coche es que se va a descargar la batería, ya que este componente va a suministrar energía a los faros sin tener capacidad de recargarse, algo que sólo sucede cuando el vehículo está en marcha. Una batería que no se carga y que a la vez está ofreciendo su energía a la iluminación del coche es una batería que en un periodo de tiempo de quizá unas horas está totalmente agotada, hasta el punto de no tener luego ni siquiera capacidad de recargarse.
Aunque en ocasiones con alimentación externa se puede lograr que el coche arranque y que el proceso de recarga de la batería se inicie, si el olvido es prologando la batería va a quedar en un estado en la que no va a tener capacidad para recargarse con el coche en marcha. Llegados a este punto de no retorno, vamos a tener que rascarnos el bolsillo para sustituir la batería, siendo esta la principal consecuencia cuando se nos olvidan las luces del coche encendidas.

Comprobar si una batería tiene carga y funciona correctamente es una tarea bastante sencilla
Cómo comprobar si la batería del coche tiene energía
Si te ves en esta tesitura, lo primero es comprobar el estado de la batería. Para ello te puedes valer de un voltímetro, un aparato electrónico que nos permitirá conocer el voltaje que tiene la batería. Para usarlo sólo hay que colocar el polo negativo en una toma de tierra o en el propio polo negativo de la batería, mientras que el polo positivo se colocará en la toma de corriente positiva de la misma. El voltaje en condiciones normales debe ser superior a 12 voltios y con el vehículo arrancado el voltaje debe superar los 13 voltios.
Lógicamente, en una batería que ha estado sometida al esfuerzo de alimentar unos faros que han estado encendidos durante horas por olvido, las cifras de voltaje con el coche parado van a ser inferiores a 12 voltios. El problema es cuando esta cifra es tan baja que el sistema no tiene capacidad de arrancar el coche. Este es el peor síntoma, aunque todavía puede haber solución si conseguimos arrancar el coche y la batería ha mantenido su capacidad de recargarse.

Dejar caer el coche por una pendiente o empujarlo puede permitirnos arrancar el vehículo sin la intervención de la batería
Batería del coche descargada: ¿Cómo lo arranco?
Si la batería del coche no tiene la suficiente fuerza energética como para arrancar el vehículo, hay dos formas de intentar que el coche arranque para así ver si la batería se recarga a partir de la energía del motor. En esencia estos dos métodos pasan por sustituir la energía eléctrica por mecánica o recurrir a una fuente de energía eléctrica externa.
Arrancar el coche sin batería en una pendiente
Un coche uede llegar a arrancar usando la energía a partir del movimiento que se llega a generar empujando el coche o dejándolo caer por una pendiente. Eso sí, no todos los coches tienen la capacidad de arrancar por este método, ya que es algo que se reserva a los vehículos con cambio manual -y no todos-. En esencia, este método consiste en que el coche adquiera una velocidad de entre 5 y 10 km/h y aprovechando la energía cinética hacer que el motor pueda ponerse en marcha.
Para ello, lo ideal es dejar caer el coche por una pendiente con la segunda marcha puesta y el embrague pisado. Cuando se llega a la velocidad mencionada, se debe soltar rápidamente el embrague para que se engrane la segunda marcha y eso empuje al motor a funcionar. El motor dará un tirón, pero puede llegar a arrancar. Nada más arrancar, hay que volver a pisar el pedal del embrague para evitar que el coche se cale. Es una maniobra compleja y que incluso ya no es eficaz en muchos vehículos, pero se puede intentar con las medidas de seguridad pertinentes.

Arrancar el coche con la alimentación de otra batería y unas pinzas es la mejor solución cuando la batería está descargada
Arrancar el coche sin batería con pinzas
La otra opción, más eficaz, es alimentar la batería con una fuente energética externa como puede ser otra batería o un arrancador externo. El objetivo es aportar energía suficiente a la batería del vehículo para que pueda asumir el esfuerzo energético de arrancar el vehículo y si, el estado de la batería no es terminar, recargarse para volver a funcionar con normalidad tras descargarse. Existen baterías portátiles o de tipo maletín que se pueden llevar en el vehículo para estos casos. Además, algunas incluso tienen compresor de aire para revisar el inflado de los neumáticos.
En ambos casos se utilizarán unas pinzas para conectar el polo positivo -normalmente rojo- de la batería en buen estado al polo positivo de la batería descargada y el polo negativo de la batería que sí tiene energía en una parte metálica del vehículo sin corriente. Una vez conectados, se enciende el coche o dispositivo con carga por varios minutos para luego arrancar el coche que tenía la batería descargada, dejándolo también varios minutos encendido para que el alternador pueda cargar la batería. Una vez terminado el proceso se pueden retirar los cables una vez que ambos coches o coche y vehículo están parados.

En caso de tener que sustituir la batería del coche hay que tener en cuenta algunos detalles
Sustitución de una batería descargada
Con todo, si el olvido de las luces ha sido muy prolongado, entra dentro de lo normal que la batería descargada ni siquiera responda y se recargue, ya sea con el alternador del coche una vez que lo hemos arrancado o con otra batería o dispositivo externo. En ese caso no va a quedar más remedio que cambiar la batería del coche por una nueva.
El cambio de batería se puede hacer en un taller, pero también lo podemos realizar nosotros mismos. En este supuesto te recomendamos que mires con cuidado los detalles de la batería para elegir la que sea correcta para las demandas del vehículo. En el manual del propio coche suelen estar las especificaciones técnicas que debe tener la batería si no somos capaces de identificar los parámetros en la batería que vamos a retirar.