¿Está la conducción autónoma tan cerca como nos están haciendo creer?
Llevamos años coqueteando con el coche autónomo, pero es probable que si tienes que cambiar de automóvil en los próximos 3 años apenas contenga soluciones de estas características. ¿Nos están vendiendo algo que no tienen?

La conducción autónoma se ha convertido en una de las últimas palabras más repetidas en los últimos años cuando hablamos del sector de la automoción. Esta tecnología se ha convertido en una prioridad para diversas empresas propias y ajenas de este sector, pero lo cierto es que apenas contamos con datos fiables en este sentido.
Es importante que nos paremos a pensar un momento y veamos qué sabemos de Waymo, Apple, Ford o Volvo, por citar algunos ejemplos. Sí, Waymo, filial de Alphabet, parece que va en cabeza en tecnología autónoma, pero otros aspirantes como la firma de la manzana no andan muy lejos al presentar soluciones muy interesantes para los próximos años.
Actualmente existen programas de conducción autónoma, pero no alcanzan el Nivel 5
Sea como fuere, lo cierto es que a eso que nos paramos a pensar vemos cómo apenas contamos con datos fiables que nos anticipen un futuro sin conductores. Tesla sí que libera actualizaciones de su increíble Autopilot, ya en su versión 2.0, pero sigue obligándonos a estar pendientes de la carretera en todo momento para evitar problemas al volante.
¿Cuándo podremos, entonces, confiar plenamente en la autogestión del vehículo? El nivel 5 de autonomía, el máximo de los 6 niveles de conducción autopilotada, no parece que vaya a llegar en el corto plazo y, en cambio, en los medios y eventos propios de la automoción no paramos de contemplar por doquier soluciones enfocadas a este segmento específico.
La industria está logrando avances muy importantes en la materia, pero la figura del conductor seguirá estando presente durante, al menos, la próxima década. ¿Hasta cuándo? Es posible que 2030 sí que dé comienzo a una estandarización de esta innovación, pero hasta entonces todo será publicidad y márketing.
El curioso caso de los Salones de Automóvil de todo el mundo
Los grandes festivales de automoción nos han acostumbrado a mostrar las últimas tendencias del mercado en materia de innovación. En este sentido, ya no es posible la presentación de un prototipo que contenga una motorización tradicional.
¿Por qué? Si miramos al futuro comprenderemos que no será viable. Tanto es así que si echamos una mirada al pasado veremos cómo las mecánicas eléctricas e híbridas eran la tendencia no hace mucho más que 10 años.
No había un solo Salón en el que algún fabricante no presentase un plausible coche con baterías incorporadas. La solución posterior era incluir una variante eléctrica o diésel en su versión de producción.
Tras todo este tiempo, el coche eléctrico e híbrido lo tenemos más que interiorizado, aunque esto no se refleje, en cierto sentido, en el panorama de la comercialización. ¿Cuál era la siguiente etapa a recorrer? El coche autónomo y, buena prueba de ello, es el Salón del Automóvil celebrado en Detroit, la primera cita del calendario de la industria.
Un Salón del Automóvil es el lugar idóneo para presentar un nuevo prototipo autónomo
Tal y como se puede leer en The Verge, la solución empleada por los fabricantes ha sido, a modo de captar la atención del público, la autonomía de la conducción. ¿Por qué este reclamo cuando hay millones de conductores que rechazan su estandarización?
Para encontrar una solución hay comprender que la competencia en el sector se ha fortalecido, obligando a los fabricantes a producir, al menos en formato concept, modelos más futuristas, que estén cargados de la más alta tecnología.
Cuál es la verdadera razón a tanto secretismo
El mejor ejemplo para comprender cómo el mercado alternativo del autopilotaje está yendo a un ritmo más lento nos lo muestra la política empleada por Volvo. La firma sueca, la cual se ha mantenido siempre fiel a sus principios por la seguridad, ha decidido declinar el lanzamiento de sus versiones aptas para la circulación sin pasajero.

El coche autónomo del futuro tendrá una disposición diferente del habitáculo durante los trayectos. El Confidencial
Hace unas semanas, Uber y Volvo acordaron la producción y suministro de automóviles preparados para circular sin conductor. ¿Qué problema podría haber al respecto? La firma escandinava reconoció que no quería poner en el mercado un producto que no fuese completamente fiable, por lo que ha desistido a cumplir con los plazos hasta no contar con una tecnología completamente segura.
Algún día el coche autónomo podría llegar a privarnos de la conducción
Sí, el coche autónomo será más seguro que uno otro cualquiera, pero aún queda mucho para que nos crucemos con uno en un semáforo. Es más, llegará un día en el que se debatirá la posibilidad de que el conductor tradicional se vea despojado de su asiento por ser un 'temerario', pero no será el caso en los próximos años.
La legislación, por último, será otro condicionante para su entrada en vigor.. Actualmente ya se pueden realizar pruebas, pero la verdadera apuesta del coche autónomo se cumplirá cuando sea capaz de acudir al lugar donde nos encontramos de forma autónoma, es decir, cuando en su interior no haya ninguna persona pendiente.